¿Cómo fue en materia de obras el 2008? Comenzamos el año de una manera muy linda: terminando el private studio de Alejandro Lerner, que no es otra cosa que un project studio instalado en su casa. Pese a que Alejandro es el dueño de El Pie, quería tener un espacio de nivel profesional dentro de su casa. Nos convocó para que le diseñáramos y luego le construyamos su estudio dentro de su casa, con vista al jardín, en un ambiente muy familiar para que, literalmente, pueda ir de la cama al living y poder componer y grabar en su ambiente de todos los días. Tiene una pequeña sala de grabación muy acogedora, suficiente para grabar baterías, voces o guitarras, y un control room pequeño pero muy ergonómico. Le hicimos también toda la integración de sistemas, el cableado, conexionado y especificamos el equipamiento. De todas maneras, como Alejandro es una persona que tiene un estudio en Buenos Aires, otro estudio en Los Angeles, está muy actualizado en cuanto a equipos. Pero nosotros colaboramos desde nuestro punto de vista de cómo integrar los equipos de la mejor manera posible. Como siempre digo: no tiene sentido tener un auto que tenga el motor de una Ferrari y las ruedas de un fitito. En los estudiosde alguna manera pasa lo mismo, es bueno tener un criterio de unidad, de infraestructura arquitectónica y acústica, equipamiento, consola, monitoreo y la integración del sistema. Tiene que ser todo parejo sino la cadena siempre se rompe por el punto más débil.
¿Cuánto tiempo duró la obra? El proyecto demandó seis meses, desde la primera vez que nos dijimos ‘hola’ hasta el momento en que Alejandro entró a su estudio y se puso a tocar y a grabar. Fue una experiencia más que gratificante. Alejandro fue muy preciso en su pedido pero estaba dispuesto a escuchar las mejoras que nosotros le podíamos dar -desde el punto de vista de la ergonometría del espacio- y las recibió con beneplácito. Es un traje a medida.
¿Cuál es la experiencia de WSDG en cuanto a la proliferación de project studios o home studios en detrimento de los grandes estudios comerciales? En Latinoamérica, Asia y el sur de Estados Unidos, que son las áreas donde me desempeño, estamos viendo que hay un pequeño retroceso en el pedido de estudios comerciales, si bien estamos haciendo muchos estudios comerciales en estos momentos. Hay un aumento significativo de los project studios que son estudios hechos a medida de los proyectos de los clientes y que en principio no van a ser utilizados en forma comercial para alquilarse por hora. Pero estos estudios tienen tamaños que pueden ser tanto o más grandes que algunos estudios comerciales. Estamos haciendo project studios en 30 metros cuadrados y también de 150 metros cuadrados. En ambos casos se trata de artistas o bandas que quieren tener su propio estudio. Podría decir que el límite inferior son 30 metros cuadrados como para poder tener un control room de proporciones consistentes, que pueda tener un audio razonable desde el diseño, una sala que permita la configuración mínima, aunque sea individual. 30 metros es un buen punto de partida.
¿Podés dar un valor estimado de lo que puede costar un project studio? Puedo decir un valor latinoamericano, hoy en día Argentina y el resto de los países de Lationoamérica más o menos están ecualizados en cuanto a los valores. Entre 1.300 y 1.500 dólares por metro cuadrado es lo que cuesta la construcción acústica completa y normalmente un proyecto acústico -al igual que cualquier otro proyecto arquitectónico- tiene un costo de proyecto y dirección de obra de entre un 15 y 20% del valor del proyecto. La diferencia con un estudio comercial es que éste necesitará abarcar un abanico muy amplio de necesidades posibles de los posibles clientes: un músico de jazz, folklore, rock, etc. El costo es el mismo, lo que cambia son las dimensiones de los espacios.
¿Cuál es el origen de los materiales que utilizan en los proyectos? Desde hace diez años todo lo que usamos en la construcción de un estudio de grabación profesional -salvo el equipamiento, que se fabrica en China, Malasia o Japón- se produce en Argentina. Nosotros somos fabricantes de los material acústicos específicos (puertas, ventanas, difusores, resonadores, paneles acústicos) y el resto de los materiales son todos productos argentinos. Lo importante es que hoy diseñar y construir un estudio de grabación en Argentina y el resto de Latinoamérica no tiene nada que ver la magia vudú o la ciencia ficción: es algo totalmente normal, un proceso transparente, cristalino, comprobable, medible, mensurable y garantizable. Cuando uno construye una casa espera que cuando abra la ducha salga agua caliente. Cuando uno hace un estudio de grabación con WSDG uno espera una cierta performance acústica desde el punto de vista de la aislación, de la acústica interior, la curva del monitoreo. Eso es algo que nosotros prometemos en nuestra propuesta inicial y luego medimos y garantizamos a lo largo de toda la vida del estudio. Nuestro trabajo no termina cuando el estudio se termina sino que va de la mano a lo largo de toda la vida útil del estudio.
¿Cuáles son los proyectos actuales que están llevando a cabo y los primeras obras para el año que viene? Estamos renovando AR Studios en Río de Janeiro, que está considerado como uno de los estudios más importantes de Brasil. Iniciamos un mega proyecto en Bogotá que es una escuela de artes digitales instalada en un edificio de siete pisos para enseñar audio, música, producción, animación, video, etc. Más de 5 mil metros cuadrados destinados a la educación. Estamos construyendo un estudio en República Dominicana en la ciudad de Santo Domingo. El estudio Pira, en Córdoba, nos ha adjudicado el rediseño de este estudio histórico de Córdoba que a partir de esta renovación quedará como un estudio de nivel internacional. Y en la misma provincia vamos a construir el project studio de Jorge Rojas la zona de Alta Gracia. En el 2008 también finalizamos la primera fase del estudio de grabación de Mariano Otero y seguimos trabajando para espacios de usos múltiples en el Faena de Puerto Madero.
